“Un sorprendente encuentro musical entre Argentina y Japón próximo a las fronteras del Jazz”

El carácter ardiente e intenso de la música argentina, mezclada con el refinamiento de la tradición musical japonesa proporcionan la materia prima para este excepcional cuarteto, que surge a partir de la reunión de dos símbolos importantes de jazz japonés y dos creativos músicos argentinos vinculados a la escena europea.

El virtuosismo de la violinista Aska Kaneko una verdadera estrella en su país natal, Japón se sirve de la escritura, a la vez sofisticada y ardiente, del compositor y pianista argentino Gerardo Di Giusto para formar un unidad que mantiene un equilibrio lleno de sutiles matices que en perfecta armonía, que se unen a la sorprendente conversación entre el bajista, también argentino, Carlos Buschini y el percusionista japonés Tomohiro Yahiro, no paran de asombrarnos ante tanta creatividad.

Estos cuatro músicos están llevando el arte de la improvisación a un nivel completamente nuevo, lejos de las fórmulas predecibles, de hecho, están dando forma a un nuevo estilo de música, que sin embargo, gracias a su elegancia y naturalidad hace que todavía suenen sorpresivamente familiar para nosotros. La intensidad de la música argentina junto a la refinada tradición musical japonesa componen la materia prima de este excepcional cuarteto, nacido del encuentro entre dos de los músicos más emblemáticos de la escena jazz japonesa y dos músicos argentinos particularmente creativos de la escena europea.

Tras recorrer con éxito festivales y salas de conciertos de Japón y otros países asiáticos, así como buena parte de Europa, Gaia Cuatro presentan ahora “Kaze” su nuevo trabajo discográfico.

Aska Kaneko nació en Tokyo en el seno de una familia de artistas, comenzó a estudiar violín y piano a la edad de 4 años demostrando tener unas dotes muy especiales, con 11 años ya integra el cuarteto Mekong Zoo que. En calidad de estudiante ingresó en la facultad de Arte de la universidad de Tokyo, pero el tiempo que dedicaba a la música le llevo pronto a ser reclutada para trabajar con músicos nipones como Sawanda Kenji y Hitoshi Watanabe, entre otros. A mitad de los 80 formó la Aska Strings Project un grupo de 30 miembros, que le permitía desarrollar sus propias composiciones, que comparte también con la Aska String Unit, lo que le permite desarrollar sus vanguardistas experimentos.

Desarrolla varios proyectos de colaboración e investigación sobre la música asiática, por lo que es invitada a formar parte de la Asian Fantasy Orchestra y The Asian Bow String Orchestra con las que giró ampliamente por Japón y el Asia continental. Además de los proyectos citados se une a Gaia Cuatro, formación con la que ha grabado 3 discos y con los que está girando actualmente por Japón y Europa, recibiendo el entusiasta aplauso tanto del público como de lacrítica del circuito de festivales. Aparte de su virtuosismo al violín, Aska también aporta su peculiar voz, que utilizada como un instrumento más le permite desarrollar un sonido único lleno de posibilidades.

El pianista, compositor y director de orquesta argentino Gerardo Di Giusto tras realizar estudios de ingeniería y de piano en el Conservatorio Provincial de Córdoba, se instala en París, para seguir los cursos de escritura musical en el Conservatoire National, así como los de piano y arreglos en la Escuela de Jazz de París. Durante algunos años trabaja como arreglista y pianista junto a prestigiosos artistas como Julien Loureau y Mercedes Sosa, entre otros. Como compositor, Di Giusto ensancha el repertorio de otros grandes solistas, entre los que cabe mencionar a Ivan Milhiet.

Las obras de Di Giusto son interpretadas y grabadas en varios países por prestigiosas formaciones y orquestas como Camerata Romeu (Cuba), Orchestre de Chambre Municipal de Córdoba (Argentina), Quatuor Diastema( Francia), Cuarteto Atlántico (Canarias), Musique de l’Air (Francia) o la Sinfónica de Bahía Blanca. Ya madura, la música de Di Giusto conoce su vía, partiendo de un anclaje en la tradición argentina, se despliega hacia las fronteras del jazz y el clásico para trascender los estilos y tender a una dimensión universal. Dentro de este espíritu nace su más original y personal proyecto: Camerata Ambigua, quinteto de cuerdas y piano.

Di Giusto lleva paralelamente su búsqueda a los confines del jazz con Córdoba Reunión y con Gaia Cuatro, además de ofrecer sus conciertos como solista y en las distintas formaciones en la que milita, participa en distintos proyectos.

Carlos “El Tero” Buschini. Nació en Despeñaderos, Provincia de Córdoba, Argentina. Músico autodidacta, se inició desde pequeño a tocar el bombo y la guitarra con grupos folklóricos de su región. A los 11 años estudia guitarra clásica. Desde muy joven participa en diversas formaciones musicales con las cuales realiza giras por Latinoamérica y Europa.

Desde 1989 vive y trabaja en Europa y elige Italia como lugar de residencia.

Comienza de este modo a conocer el universo musical italiano frecuentando los talleres jazz dirigidos por Franco d’Andrea y Attilio Zanchi y participando en workshops con músicos como Alan Caron y Joe Santiago, Franco d’ Andrea. Siguió estudios musicales de composición en el CPM de (Milán) y en la AIMRA de (Lyon). Ha realizado giras con diferentes figuras del jazz italiano, francés y japonés como: Julien Lourau, Bojan Zulfikarpasic, Magik Malik, Minino Garay, Javier Girotto, Phil Drummy y Aska Kaneko, entre otros.

Carlos Buschini participó paralelamente a formaciones como Los Ángeles Negros, Franco Mussida (PFM), Simfonia Populare per Mille Chitarre, Minino Garay y los Tambores del Sur, Trio Nuevo Encuentro, Horizon Quartet, World Tango Trio, Havana Mambo, Cantinho Brasileiro y el Cuarteto Nuevo Tango. En la actualidad participa de forma active en grabaciones y giras por Europa, América y Japón con formaciones como Madre Tierra (con Javier Girotto), Córdoba Reunión (con Gerardo Di Giusto y Minino Garay), Tango Negro Trio, Cuarteto Rosamonte y con Gaia Cuatro.

Tomohiro Yahiro, nació en Japón en 1961, pero se crió en Las Palmas de Gran Canaria, donde estuvo varios años y en su adolescencia se vinculó a varios grupos de rock de la escena local. Regreso a Japón en 1979, y rápidamente se introdujo en el mundo de la música en su país natal e hizo su debut profesional en 1980. A lo largo de la década de los 80 fue miembro regular de la banda de rock nipón Jagatara y más tarde en SKen, formaciones locales TOMOHIRO YAHIRO Bateria & percussion que llegaron a ser ampliamente reconocidas en su época.

Participando además en muchas grabaciones y giras de artistas pop como Katoh Tokiko, Masashi Sada, Ohnuki Taeko, Minako Yoshida, Agawa Yasuko y Joe Hisaishi. Por otro lado, ya en los 90, se acercó a la escena del jazz y ha estado en activo con los artistas más representativos del jazz japonés como Yosuke Yamashita, Mukai Shigeharu, Kazumi Watanabe, Fumio Itabashi y Umezu Kazutoki. Aparte de sus colaboraciones con artistas del ámbito internacional como Hugo Fattoruso, Pierre Barouh, Joyce, Toninho Horta y Jorge Cumbo, entre otros.

En la actualidad se mantiene en activo con GAIA CUATRO y en el proyecto conjunto con Hugo Fattoruso: Dos Orientales, además de colaborar con otros músicos de la escena nipona como, entre otros, Akira Sakata «Yoshii», Miyuki Onitake Trio y Tyrone Hashimoto.